Ham Sa! Pensando en la manera en que avanzamos por la vida, hay quienes van con una seguridad y certeza absoluta y quienes dudan al dar cada paso. Están los que caminan sabiendo hacia dónde van y los que se sienten en medio de un laberinto.
Quien pisa fuerte y determinadamente es porque esta convencido de sus creencias, no duda de si mismo, sus raíces son profundas como las de un árbol y lo sabe, las conoce… por eso puede crecer, avanzar firmemente, mas allá de cualquier adversidad, con el tronco erguido pero lo suficientemente flexible para amoldarse a cualquier improvisto.
Con su mente abierta, como las ramas del árbol que se conectan con todo lo que hay alrededor para sentir, percibir, observar todas las alternativas posibles y decidir a conciencia hacia dónde orientar sus hojas, ramas y flores. Y así florecen sus sueños, su camino tiene sentido para él ya que se ha afirmado fuerte al suelo y se ha permitido explorar el cielo.
Si caminas por un sendero que no tiene mucho sentido para ti, o si estas dando vueltas de acá para allá, te invito a revisar tus raíces, recordar de donde vienes, a donde quieres ir. Revisa tus creencias limitantes, todo aquello de lo que crees que no eres capaz. Ponte objetivos claros y trabaja día a día para alcanzarlos, se consciente de que nadie más que tu puede lograr tus metas,… Tú eres todo lo que hace falta para lograrlas.
En Armonia Divina
Agregar comentario